miércoles, 31 de julio de 2013

Dejar la heroína alejándote de lo que te conduce a ella

La heroína es una de las drogas más adictivas que se conocen. Alejarse de ella es un camino difícil. Esta es una de las primeras piedras hacia el éxito.
Me llamo Miguel y soy heroinómano… no practicante. Ya llevo veinte años sin tomar drogas y lo he conseguido gracias a mi decisión de no hacerlo. Que lo haya conseguido se lo debo también a las herramientas y a la ayuda que recibí en CITA. Sin embargo, hay más, mucho más. No tomar drogas está bien, pero lo que me enseñaron en CITA ha resultado ser transcendental en mi vida. Cuando estaba allí, no era capaz de verlo, pero, con los años he comprendido que mi vida ha sido intensa, plena y feliz gracias a lo que allí pude aprender.
Los profesionales de la clínica son gente muy lista. Ellos sabían que la única manera de sacarme de las drogas era arreglar aquello que me conducía a ellas. De modo que arreglaron mi interior, me arreglaron la vida. Y éste es un regalo que hoy quiero devolver.
Permitidme pues que os cuente mi experiencia.
A los diecisiete años probé los porros y me parecieron la solución. Solución a mi malestar, solución a mi desasosiego, solución al problema de relación con los demás. El precio que pagué fue tirar mi vida por el retrete. Pasé a estudiar lo justo para evitar que me echaran del colegio. Y así pasé varios años hasta que probé la heroína. Por aprensión, nunca llegué a inyectármela, pero en la heroína encontré refugio, placer y bienestar. Y en la euforia de aquel descubrimiento, se la di a probar a mi hermano Pablo, quien, como yo, se enganchó inmediatamente y por los mismos motivos: una infancia de malos tratos, unos padres ausentes y la facilidad de obtener dinero en casa.
La muerte de mi padre me hizo daño, pero muy poco de aquel dolor pudo aflorar por la anestesia que me procuraban las drogas. Por supuesto, el dolor estaba ahí y saldría en cuanto pudiera volver a recuperar mis sentimientos.
En septiembre de 1989, después de 5 años de consumir drogas y habiendo ya tocado fondo, fuimos a conocer CITA. Yo ingresé aquel mismo día y mi hermano ingresaría poco después. Después de un mes de tratamiento, pedí irme voluntariamente. Echaba de menos colocarme y aún me quedaban algunos barcos por quemar. En febrero del 90, ya había quemado todas las naves y no quedaba otro camino que reingresar, de modo que volví a CITA. Pero volví a meter la pata y me salté algunas normas. Me sancionaron durante un mes y me dijeron que, o me ponía las pilas o me tendrían que echar. Fue en ese momento, no antes ni después, sino justo entonces, cuando tomé la DECISIÓN. Sí, decisión con mayúsculas, pues comprendí que me encontraba ante una bifurcación de caminos. Por un lado, mi vida ya estaba en el retrete, tan sólo había que tirar de la cadena, seguir con la actitud yonki y vivir en la calle o en la cárcel o encontrar la muerte. Del otro lado, había una vida. Y ese fue el camino que escogí. Así de simple, decidí no tomar más heroína, pero también decidí aprovechar el tratamiento, pues ese era el camino.
El camino era una mierda, duro como no os podéis hacer una idea. La base de la estancia en CITA es ponerse en juego, o sea, ser transparente, hacer y decir lo que se siente y se piensa. A cambio de esa apertura, hay dolor, mucho dolor. El dolor de ver tus mierdas, el dolor de enfrentarte a tus miedos, paranoias y tonterías. Luego, las terapias, incluidas las terapias de grupo, donde la ayuda de los compañeros es darte caña en tus errores. La letra con sangre entra, ¿no? Yo en eso fui un privilegiado, ya que contaba con mucha gente para darme caña, mucha, mucha. Estaban aquellos a los que les caía mal por los pasotes que me di al principio. También estaban los amigos de mi hermano que, veteranos ya, tuvieron el buen gesto de ayudarme… dando caña, claro.
Bueno, no quiero hablar mucho de mi tratamiento sino de lo que vino después. Tan sólo señalar que tuve un tratamiento intensivo y muy aprovechado por mi parte. Eso es lo importante. Siempre he considerado que, en mi vida, lo único que terminé, lo único que hice bien, fue mi tratamiento. Para mí, pues, es un orgullo decir que soy heroinómano, pues me resulta sinónimo de triunfador, de combatiente, de victorioso.
Sin embargo es mucho más. Además de la batalla ganada, he pasado por CITA. He pasado por más de diez horas de terapia diaria durante 15 meses. ¿Os lo podéis imaginar? ¡¡Es un lujo!! Es un lujo tener terapia. Todo el mundo la necesita, pocos la tienen, menos aún se paran a mirar en su interior. Vivimos en un mundo acelerado, se vive deprisa y a nadie le gusta sufrir, de modo que las inseguridades, los problemas de personalidad y de relación, quedan enterrados en el día a día.
Es por eso que yo me siento afortunado. Veo que, al conocerme a mí mismo, tengo absoluta facilidad para relacionarme con los demás. Así pues, disfruto con la gente y la gente disfruta conmigo. Estoy tranquilo y sin complejos, me siento feliz de tener sentimientos y sensaciones, puedo mirar en mi interior y disfrutar de lo bueno y de lo malo, sabiendo que soy yo. No hay nada mejor que esto.
Gracias a ese conocimiento, he podido llevar una vida coherente conmigo mismo. No ha sido fácil y he tenido fracasos. He pasado por dos matrimonios y seis empresas, además de cuatro o cinco trabajos por cuenta ajena. Conozco mis debilidades y mis fortalezas. Sé dónde tengo talento y sé cuándo busco refugio. Esto es muy importante, porque no he dejado de ser heroinómano, es decir, de intentar refugiarme frente a la vida.
Y como refugio me han servido el alcohol, los porros, las mujeres, la tele, los videojuegos, un libro, que sé yo. El caso es que no puedo engañarme a mí mismo porque nada de eso me llena. Tan sólo es perder el tiempo, posponer el enfrentarse a la realidad y, la verdad, con los años ya no admito perder tiempo. Vencer nuestros miedos es lo que te hace avanzar y crecer. Reconocer tus sentimientos, estar bien con uno mismo, vivir de acuerdo a como uno es, eso es la libertad.
Aún tengo más cosas que decir. Tienen que ver con la muerte y con el tratamiento. He visto la muerte y la he visto de cerca. Y yo quiero vivir. ¿Y vosotros? ¿Queréis morir? No, ¿verdad? Seguro que queréis disfrutar del amor, de las risas, de la admiración de los demás y de tantas otras cosas, aunque sin olvidar que el desamor, el sufrimiento o el llanto también forman parte de la vida. Todos vosotros habéis elegido vivir y os espera una vida guapísima, seguro. No perdáis esta perspectiva. Por mucho que ahora os sintáis mal, es pasajero.

Ese es mi mensaje: la vida es bella aunque duela. Lo que no te mata te hace más fuerte. El tratamiento os permite dejar la droga, pero también os da alas y muy poca gente las tiene. Por favor, tomadlo en serio, arriesgaos, no temáis al dolor y no os refugiéis. Afrontar las cosas os hace mejores, aunque, por supuesto, las ganas de refugiarse no os abandonarán el resto de vuestra vida. Somos heroinómanos, ¿vale? Y a mucha honra.

Puedes encontrarnos en la página web de Clinicas Cita 

lunes, 29 de julio de 2013

Consuelo y soledad

Hola a todos:
Soy Juanjo (Alguien me llamó ayer “barbour yogui”, no sé quien es). Son las 7.30 h. de la mañana y aún no ha amanecido. La noche no es fría y en el cielo hay muchas estrellas. Mientras espero que Juanito se despierte, me preparo un café y abro el ordenador para escribir.

El caso es que mi amigo Albert nos habló ayer del compromiso y, cuando oigo esa palabra, me dan ganas de salir corriendo, pero salir corriendo. ¿A dónde? Si el compromiso fuera una fiera peluda tendría lógica escapar, pero… ¿cómo escapa uno de un concepto?
- Hola Juanito, buenos días.
- Hola amigo. ¿Qué tal ayer tu curso de profesores?
- Bien, estoy contento. Mucha gente y con ganas de hacer, pero le estoy dando vueltas al tema del compromiso. Albert nos invitó a que hoy, domingo por la mañana, declaremos en público a que nos comprometemos durante los nueve meses del proceso de formación y yo no sé qué me pasa con esto del compromiso que, de sólo de pensar en ello me mareo.
- Comprendo. Y es que pensar marea.
- Ya. Y con el compromiso, ¿por qué me inquieta esa palabra?
- Bueno amigo, lo primero es que “a palabra no es la cosa y, cuando una palabra nos inquieta, hemos de explorar la cosa.
- ¿Qué cosa?
- Veamos. Lo primero es preguntarte: ¿con qué te comprometerías sin dudas ni esa inquietud de la que me hablas? ¿Con que te comprometerías sin dudar ni un instante?
- Buffff, menuda lista te haría: Con mi felicidad, con la paz interior, con la alegría de vivir, etc.
- ¿Y con qué no te comprometerías nunca?
- Ja ja ja. También tengo una lista muy larga: Con la patria, con hacer yoga el resto de mi vida, con un dogma o filosofía, con lo que querré hacer en el futuro, etc.
- Bien. Ahora exploremos la naturaleza de aquello con lo que sí te comprometerías y de aquello con lo que no. Por lo visto, sí te comprometerías con aquello que se siente (felicidad, paz interior, etc,) y no te comprometerías con los “objetos” (patria, dogma, futuro, etc)
- ¿El futuro es un “objeto”?
- Claro… ¿O puedes tú sentir tu futuro?
- Si pienso en él, sí.
- Eso no es sentir, tú mismo lo has dicho “pienso”.
- Entiendo. Quieres decir que puedo comprometerme sin problemas con lo que no es un objeto sino más bien un contenido.
- Eso parece, pero exploremos un poco mas: Si te comprometes con ir mañana a la playa, ¿por qué crees que eso te hará sentir bien? ¿Qué sucede?
- Que, como llueva, tendré un problema.
- En otras palabras, ¡¡¡pierdes tu libertad!!! Pero, ¿y si el compromiso fuera sentirse bien con playa o sin ella? ¿Perderías también esa libertad?
- ¡¡¡Ostras, Pedrín!!! Es verdad. Comprometerme con lo que se siente no me da miedo. Es el compromiso con un objeto lo que me pone esa camisa de fuerza que no me deja respirar.
- Pues ahí tienes tu compromiso: Dejo atrás el compromiso con las cajas (objetos) y acepto el compromiso con los contenidos (lo que se siente) Que es lo mismo que decir: Dejo atrás el tiempo (toda caja opera en el tiempo) y me comprometo con el ahora (siempre que uno siente es ahora)…Amigo mío, recuerda que el valor predominante en tu vida es la libertad.
- Juanito, te quiero mucho. No sabes cuán a menudo me rescatas de la oscuridad. ¿Cómo podemos formular una propuesta de trabajo con este tema?
CONSUELO Y SOLEDAD “COMPRAN MISO”
Consuelo y Soledad eran dos mujeres jóvenes y rebeldes. Cuando ya tenían fijada la fecha de sus bodas y apalabrado el viaje de novios al típico Caribe, ¡¡¡zas, se dieron el piro!!! ¡¡¡Qué tías!!!
Sus familias estaban muy preocupadas. Decían: “¿Y qué hacemos ahora con los vestidos de novia, con el viaje a Cantipicun, con el ático dúplex y sus 60 años de hipoteca? ¡¡¡Qué lío!!!
Soledad y Consuelo eran conscientes de la preocupación de sus familias y también de que a los que iban a ser sus maridos les debían estar saliendo telarañas en el altar. ¡¡¡Egoístas!!!
El papá de Soledad, el Sr. Justo Destino, escribió una dolorosa carta a su hija en la que decía: “Hija mía, a tu madre y a mí nos estás matando a disgustos. No entendemos esa actitud. ¡¡¡Sólo piensas en ti!!!
La mamá de Consuelo,la Sra. DoloresCrónicos, llamó por teléfono a su hija y le dijo: “Haz el favor de atender a tu compromiso, vuelve, cásate y paga tu hipoteca. ¡Haz las cosas como Dios manda!
Pero Soledad y Consuelo no querían el compromiso. Ni la boda, ni el viaje a Tipicun, ni el ático dúplex con su sexagenaria hipoteca ni nada de nada. ¡¡¡Que no queremos compromisos, caray!!!
Las familias de Soledad y Consuelo estaban tan dolidas, los que iban a ser sus maridos tan cabreados, y el banco de las hipotecas tan molesto…¡¡¡Y eso que con la hipoteca regalaban una olla!!!
El caso es que esas chicas se vieron obligadas a irse lejos de sus entornos, a construir una nueva vida en algún lugar nuevo, a recomenzar otra vez. ¡¡¡Cualquier cosa antes que el compromiso!!!
Y se fueron a vivir al Chapazonas, una selva lejana y remota, donde nadie las presionara a hacer lo que no querían; un lugar sin leyes ni formas, muy, muy lejos. ¡¡¡Bastante mas allá de Badalona!!!
Llegaron a un pequeño poblado llamado Nohhay Nippan y se alojaron en la única posada de aquella modesta aldea: la posada Nikamas Nikomes. ¡¡¡Lo que hay que hacer para ser libre!!!
Buscaron trabajo en la única tienda de la aldea, el bazar Komida Nohhay, y pidieron consejo sobre el compromiso al sabio de la comunidad, el Chamán  Nomhe Komunchusco. ¡¡¡Que flaco era!!!
El Chamán les dijo: “El compromiso es lo único que da sentido a una vida”. Soledad y Consuelo lloraron a solas y desconsoladamente. Mientras lloraban y lloraban decían: “¡¡¡Ke hambre tenemos!!!”
El caso es que, como todo el mundo hablaba del compromiso, las chicas comenzaron a sentirse extrañas por rechazarlo. De hecho, se preguntaron: ¿Seremos malas?
Y buscaron cosas con las que comprometerse: El mono autóctono del Chapazonas llamado Nokomiayer; el partido político de la aldea, el KKY (Kierokomerya), etc. ¡¡¡Na de na!!!
También intentaron comprometerse con el cambio climático y la preservación del árbol Chapazónico Nifrutostengo y con el movimiento feminista Sikomiera Kebien. ¡¡¡Nada, no funciona!!!
Tras varios años de darse de bruces con el intento de comprometerse, dijeron: “Por lo visto lo del compromiso no va con nosotras, así que a partir de ahora ¡¡¡que se comprometa su padre!!!
Llegó una terrible hambruna al Chapazonas. Si había poca comida habitualmente, ahora sólo quedaban unos pocos sacos de sopa de miso deshidratada. Y hacerse con ellos era difícil. ¡Qué hambre!
Tanta hambre tenían Soledad y Consuelo, tan cansadas estaban de buscar algo de miso, que al final optaron por desplazarse a otras aldeas buscando el preciado miso. ¡¡¡Hay que comer!!!
Y Soledad y Consuelo viajaron por toda la Chapazonía, muertas de hambre, mientras decían a voz en grito: “Compro miso, compro miso, compro miso” ¡¡¡Y se comprometieron con comer!!!
- Amigo, cuando uno “baja a tierra”, es decir, cuando uno contacta con sus verdaderas necesidades, aparece de una manera natural el compromiso. Dicho de otra manera, comprometerse con algo que no sea una necesidad tuya sino “algo que crees que debieras” es la mejor manera de perderse.

- Gracias Juanito. Entonces podríamos decir que lo primero sería localizar aquellos valores que son absolutamente necesarios en mí para vivir. Y, por el solo hecho de sentir esos valores, aparecerá de un modo natural el compromiso. Uuuuuyyy, qué miedo.



Puedes encontrarnos en la página web de Clinicas Cita 

lunes, 22 de julio de 2013

José María Fàbregas: Fumar favorece el consumo de alcohol




Las personas que fuman consumen más alcohol que los no fumadores. De hecho algunos estudios epidemiológicos han mostrado estadísticamente que fumar incluso multiplica por diez el riesgo de abusar del alcohol, pero hasta ahora se desconocía el entramado neurobiológico que había detrás de este comportamiento. Una investigación publicada en el último número de la revista Neuron aclara cómo la nicotina facilita un mayor consumo de alcohol, en especial si se empieza a fumar durante la adolescencia.

El estudio, dirigido por John Dani, de la Facultad de Medicina de Baylor, en Texas, muestra que incluso una única exposición a la nicotina cambia la forma en que el cerebro responde a las bebidas alcohólicas. Ambas sustancias, tabaco y alcohol, ejercen su acción a través del sistema de recompensa del cerebro. Este sistema es el encargado de hacernos sentir placer de forma natural, gracias a un neurotransmisor llamado dopamina.

Tanto la nicotina como el alcohol, cuando actúan por separado, igual que ocurre con el resto de las drogas, aumentan de forma exagerada la liberación de dopamina, de ahí las sensación de euforia y placer que producen las sustancias adictivas. Sin embargo, según afirman estos investigadores en su estudio con roedores, cuando se consume a la vez nicotina y alcohol, se producen interferencias entre ambas sustancias.
En concreto, las ratas expuestas a la nicotina, incluso una sola vez, tienden a beber alcohol más a menudo que las que no han estado expuestas a esa sustancia del tabaco. La explicación parece estar en que la nicotina hace que la respuesta placentera al alcohol por parte del cerebro sea menor, por lo que se necesita mayor dosis para conseguirla.

Al parecer la nicotina induce en hipotálamo la liberación de las hormonas relacionadas con el estrés, como el cortisol, que actúan como freno del sistema de recompensa, que se vuelve menos capaz de percibir la sensación de placer asociada con el consumo de alcohol. Estos resultados refuerzan los estudios anteriores que habían puesto de manifiesto que las hormonas del estrés tienen un papel crítico en el efecto placentero del alcohol y en que el consumo se vuelva compulsivo.

«Los jóvenes suelen empezar a fumar en la adolescencia, y la exposición a la nicotina posiblemente contribuye a una mayor vulnerabilidad al abuso de alcohol más adelante», concluyen.

(Fuente: ABC)

Las clínicas CITA para el tratamiento de las adicciones ofrecen tratamientos integrales y eficaces para la desintoxicación y la deshabituación del alcohol.

viernes, 19 de julio de 2013

José María Fàbregas: Los cuentos terapéuticos


Clínicas CITA, centro para el tratamiento de las adicciones, ofrece talleres de yoga y meditación, y talleres de gestión de emociones y crecimiento personal, como complemento eficaz a las terapias individuales y de grupo.

Juanjo, el autor de este cuento, es nuestro profesor de yoga.

AL REVES SE ENTIENDE MEJOR

Hola a todos:

De nuevo un domingo por la tarde charlando con el sabiondo de Juanito. Hoy le quiero proponer que nos ilumine acerca de las causas del sufrimiento humano. A menudo vivo como comparando lo que es con algo que está pre-escrito, y ello no me deja descansar en lo que ahora es.
- Hola sabiond... Ay, Juanito.
- Buenas tardes amigo.
- Bueno, ¿qué te parece lo expuesto? ¿Es natural o necesario comparar lo que es con un modelo de lo que debería ser? Dicen los expertos que de este conflicto emana la expansión humana.
- Evidentemente sólo se camina cuando hay algún sitio donde uno quiere llegar, pero eso no debiera causar sufrimiento. Lo que causa sufrimiento es la ingratitud.
- ¿Ingratitud?
- Sí, observa cuando un matrimonio se divorcia... ¿Por qué hay rabia en lo que se deja atrás? Observa cuando uno se cambia de casa... ¿Por qué el hecho de ir a un sitio mejor nos impide ver lo bueno del sitio que dejamos? Y cuando uno se equivoca... ¿Por qué nos avergonzamos en vez de agradecer el error que es causa de aprendizaje?... En fin... Imagina: Me divorcio y agradezco todo lo bueno que viví con esa persona y por todo lo que aprendí en lo problemático. Me cambio de casa y agradezco tantas cosas hermosas vividas en la antigua casa. Me equivoco y agradezco mi error ya que aprendo de él, etc. De este modo (al no haber rechazo por lo anterior), todo cambio es hecho con dulzura. La pregunta correcta sería: ¿Por qué me cuesta agradecer algunas cosas (las que llamo malas) y otras no (las que llamo buenas)?
- Hombre, Juanito... Agradecer algo malo es para nota, ¿no?
- Sí, si de verdad fuera malo. Si estamos de acuerdo que lo anterior ayuda a crear lo presente, en ese afán (natural) de mejora, o sea evolución, ¿sigue siendo malo? Si un error me ayuda a comprender y mejorar, ¿es malo haberlo cometido?
- Pero yo siento con claridad un dolor cuando algo malo sucede... ¿Me lo invento?
- ¿Quien es ese yo que siente dolor? Si tu adiestramiento hubiera sido otro, tu dolor estaría en otro lugar, y... ¿Qué tipo de verdad es esa que cambia por el simple hecho de cambiar su pasado? ¿Eres tu tu pasado? o ¿Eres ese a quien tu pasado afectó? Amigo, para mí, tu eres ese y no lo que ese hizo con su pasado, ya que, aunque ese hubiera tenido otro pasado, seguiría siendo ese. ¿Entiendes?
- No.

LOS DOS LIBROS


Cuando los niños nacen en el planeta Arreit, se les hace un ritual que se llama omsituab y que consiste en regalarles un libro en blanco, el libro de las serbmutsoc saneub. Durante toda su vida llevarán ese libro y escribirán en él aquello que será su historia... ¡¡¡En fin, una tontería!!!

El Dios del planeta Arreit, al que llamaban Soid, debió tener un mal día cuando se le ocurrió lo del librito, ya que no pensó en el pequeño detalle de que los niños nacen sin saber escribir, de modo que sus progenitores, es decir, sus serdap lo escribían durante los primeros años y luego en un ritual llamado al aremirp nóinumoc se lo daban para continuar... ¡¡¡Ala, a currar!!!


Pero como los serdap no ven a sus hijos como son, sino como quisieran que fueran, comenzaban a escribir un montón de chorradas en el libro de las serbmutsoc saneub y, cuando tras el ritual se lo pasaban para que lo continuaran, los niños no entendían nada, entonces preguntaban a los serdap e incluso a los soleuba lo que tenían que escribir... ¡¡¡Vaya, un sinvivir!!!


El planeta Arreit era grande y contenía una gran variedad cultural dependiendo del lugar donde se nacía. Se llamaban sesiap y tenían una especie de ideología moral que se llamaba noigiler. Y eso lo complicaba todo aún mas, ya que cuando los niños recibían el libro en su aremirp noinumoc se encontraban con un buen montón de tonterías... ¡¡¡A que no lo sabías!!!


En aquel planeta, se decía que un niño había madurado cuando se responsabilizaba de su propio libro, pero como les había llegado medio escrito, ni era suyo ni de nadie; era como continuar un cuento que comenzó otro. Quizá por ello el planeta Arreit se caracterizaba por tener unos habitantes absolutamente inmaduros, caprichosos e inseguros... ¡¡¡Y encima chulos!!!


Lógicamente, y a efectos de sobrevivir, los niños de Arreit comenzaron a tener un libro oculto, el de las serbmutsoc saneub, y el otro, el de ol euq ed dadrev airah En el primero continuaban la tradición de sus serdap, soleuba, etc. Y en el segundo se dejaban ser libres. Pero, como el pecado mas grande de Arreit era la datrebil, lo guardaban en secreto... ¡¡¡Una cuestión de respeto!!!


El problema es que a medida que la gente crecía, los libros se iban llenando. Uno de verdades y otro de mentiras. El de las verdades era el que ocultaban y el de las mentiras mostraban. Y, si a alguno se le escapaba, le llevaban a un zeuj y le condenaban. Odanigram y laicosa le llamaban y a nadie le gustaba, así que fingir y ocultar se tornó en algo natural. ¡¡¡Y si no, vamos mal!!!


Y el tema no acababa ahí. Cuando dos se casaban, como ambos ocultaban, eran los libros los que se relacionaban. Cuando un siap le declaraba la guerra a otro, eran los libros los que iban a la guerra, etc. Sin embargo, en el libro oculto, aquel que se llamaba ol euq ed dadrev airah, había contenidos muy similares, pero como estaban ocultos, nadie sabía nada...¡¡¡Qué pasada!!!


En la historia de Arreit hubo varios valientes que intentaron sacar a la luz el libro oculto, les llamaban sortseam Y uno de ellos, que popularizó una frase que decía: La verdad os hará libres, llegó a ser muy conocido, se llamaba Otsirc y lo mataron inmediatamente. Luego, unos cuantos seguidores fundaron el omsinaitsirc y se montaron un libro que no tenía nada que ver. ¡¡¡Joder!!!


También en Arreit había unos técnicos de la psique, los sogolocisp, pero lo que corregían era el libro de las serbmutsoc saneub, diciendo que el otro libro era una estupidez. En las iglesias, los saruc también corregían el libro y advertían de que, si alguien tenía algo escrito en el oculto, que se confesara porque era pecado mortal, una guarrada y muy inmoral. ¡¡¡En fin, lo normal!!!


A medida que los habitantes de Arreit crecían, el doble peso (por los dos libros) les contraía y encorvaba. Y, cuando llegaban a abuelitos, estaban cansados y jorobados, además de muy enfadados por el absurdo doble trabajo. Y, por si eso fuera poco, cuando uno se moría, un libro permanecía y el otro desaparecía. El libro abierto quedaba para contar la mentira social y el oculto continuaba su itinerario espacial. ¡¡¡Fenomenal!!!


MORALEJA


Si le muestras al mundo una mentira correcta, probablemente te harán la ola. Si le muestras al mundo tu verdad imperfecta, probablemente te lapiden. Pero si muestras tu verdad, ¡¡¡Dios te hará la ola!!!

PD

Y si además de Dios (que no es poco), quieres que Juanito y yo te hagamos también la ola....click-click y entra en este lindo blog http://juanjo-kundalini.blogspot.com.es/

José María Fàbregas Pedrell: El lenguaje de los caballos.



Ayer se celebró en Clínicas CITA una demostración de doma natural, a cargo de Chechu Pardo. Durante la sesión, mostró como acercarse al caballo y establecer con él un lazo de amistad, de pertenencia a la manada y de colaboración. Desde hace muchos años, una de las terapias fundamentales en las Clínicas CITA para el tratamiento de las adicciones es la Psicoterapia Asistida por Equinos, conducida por un psicoterapeuta y un especialista en caballos.

Chechu Pardo se inició en el mundo de los caballos de una forma más o menos tradicional, hasta que se cuestionó la forma tradicional de entender al caballo, muy a menudo llena de brutalidad o de incomprensión. Consecuentemente, se inició en una búsqueda de nuevos métodos que se basasen en otras formas de comunicación.

En esta búsqueda, conoció el trabajo de Klaus Ferdinand, siguiendo sus investigaciones y métodos. A partir de estas revelaciones, investigó por su cuenta e incorporó técnicas propias, viendo que los resultados eran espectaculares pues permitían obtener caballos confiados, y con un alto grado de sumisión y deseo de acompañar al jinete. Durante este tiempo, domó una serie de caballos que tenían problemas de comportamiento, área donde sus métodos se mostraban más útiles. Más tarde, se inició también en los métodos de Lucy Rees.

Todas esta experiencia le ha permitido diseñar nuevas técnicas de monta eficaces y respetuosas con el animal.

Jose María Fábregas
www.clinicascita.com


jueves, 18 de julio de 2013

José María Fàbregas Pedrell: Los españoles son los segundos mayores consumidores de cocaína de la UE y los terceros de cannabis



Los españoles se sitúan en el segundo puesto del ránking de consumidores de cocaína de la UE, sólo superados por los británicos. En cuanto al cannabis, ocupan el tercer puesto por detrás de los daneses y franceses. De este modo, los españoles se mantienen entre los mayores consumidores de estas dos drogas en la Unión Europea, aunque son superados en cocaína por los británicos y en cannabis por los daneses y los franceses.

Así se desprende del informe anual divulgado por el Observatorio Europeo de Drogas y Toxicomanías, la agencia de la UE que estudia el consumo de estupefacientes.
Según este documento, la droga más extendida en España es el cannabis. Un 27% de los adultos españoles consumen esa droga alguna vez a lo largo de su vida, un nivel que en Europa superan en tres puntos porcentuales Dinamarca y Francia. En el sector de población más joven, de los 15 a los 34 años, el consumo de esa sustancia se registra en un 17%, nivel casi idéntico, y de los más altos en Europa, al de Francia y Polonia. 
En cuanto a la cocaína, ha sido consumida alguna vez por un 9% de los adultos españoles frente al 10% que alcanza en el Reino Unido. Entre la población más joven, los españoles mantienen porcentajes muy próximos a los ingleses en el consumo de esa sustancia, que se sitúan en torno al 4%. 
(Fuente: Antena 3)    

José María Fábregas Pedrell
www.clinicascita.com    

Jose María Fabregas Pedrell: La DGT estudia duplicar las multas



La Dirección General de Tráfico (DGT) está estudiando duplicar la actual sanción económica por el consumo de alcohol o drogas al volante, calificada como muy grave, que pasaría a suponer una multa de 1.000 euros y supondría la pérdida del carnet entre uno y cuatro años. Se trata de una propuesta planteada en el borrador del anteproyecto de modificación de la Ley de Tráfico y Seguridad Vial, en fase "muy preliminar".

Circular con una tasa de alcohol en aire espirado superior a 0,25 miligramos por litro, que es la reglamentariamente establecida, está ahora sancionado con 500 euros. Y se considera delito, según el Código Penal, la conducción bajo los efectos del alcohol con una tasa superior a 0,60 en aire espirado o con una tasa de alcohol en sangre superior a 1,2 gramos por litro, que, cuando se apruebe la nueva reglamentación, será castigado con la pena de prisión de 3 a 6 meses o a la de multa de 6 a 12 meses y trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días, y, en cualquier caso, con la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años.

La modificación de la ley de Tráfico y Seguridad Vial, prohibirá los detectores de radares y establecerá el test de saliva como único método para constatar los niveles de droga al volante.